La falta de conciliación y los estereotipos que giran en torno a las mujeres son uno de los obstáculos que enfrenta el género para poder desarrollarse profesionalmente en el rubro de la minería.

‘Aún falta dar pasos en inclusión de más mujeres en puestos clave’, indica la gerenta general de Teamclass, división de capacitación laboral del Grupo de Empresas Teamwork, Verónica Garrido, quien además comenta que una de las metas propuestas por la Política Nacional Minera 2050 es alcanzar el 20% al 2030 y un 35% al 2050.

A su juicio, contar con mecanismos de contratación y desarrollo de carrera que sean preparados y pensados con perspectiva de género y lógica conductual, y validando los estilos de liderazgo de mujeres, entre otras cosas, ‘son una respuesta efectiva para cumplir este objetivo’. Agrega que en algunos casos se ha fortalecido su inclusión en directorios y comités ejecutivos, mientras otras estrategias se han centrado en el aumento de participación de mujeres en puestos de entrada y en los cargos del negocio y de la cadena de valor, pero asegura que el avance debe ser en todos los niveles de la organización, aumentando también su participación en los cargos de decisión.

‘Mientras existan debilidades en los planes de desarrollo de carrera y en el acceso a roles de liderazgo, las oportunidades seguirán siendo tomadas por quienes ya están en los niveles de supervisión y liderazgo’, añade la directora ejecutiva de Somos REDEG consulting & training, Lilian Denham, quien señala que hay más de 20 mil posiciones proyectadas en demanda de capital humano de cara al 2030, en los perfiles vinculados a mantenimiento y operación, que, según apunta, representan respectivamente el 51% y 37% de la demanda de la industria para la próxima década. ‘Sin embargo, no podemos pretender fomentar la equidad de género solo en los niveles operativos con mujeres operadoras de CAEX’, aclara.

Otro de los desafíos está ligado con la retención. La ministra de Minería, Aurora Williams, enfatiza en que ya que no basta con atraerlas al sector, sino que se debe garantizar su permanencia. ‘Esto requiere gestionar temas importantes como la conciliación entre la vida laboral, familiar y personal, así como la prevención de la violencia y el acoso en los lugares de trabajo’, asegura, y señala que el impacto más importante para la industria es la pérdida de talento, ya que ‘al no integrar a las mujeres en la fuerza laboral, se desaprovecha la mitad del potencial disponible’.

Para Williams, la falta de inclusión limita no solo a la industria, sino también a las posibilidades de crecimiento y empoderamiento de las mujeres y, ‘por lo tanto, a la sociedad en su conjunto’, e indica que en los próximos diez años se espera la creación de aproximadamente 34 mil nuevos puestos de trabajo en el sector, lo que, afirma, demanda una adecuada preparación de talento femenino.

Educación como base

‘Cuando hablamos de la educación secundaria es el momento ideal para introducir a las jóvenes a las STEM, áreas fundamentales para la minería’, plantea la directora de Ingeniería Civil en Minería de la U. del Desarrollo, Yesenia Marulanda. A juicio de la experta, al exponer a las mujeres a estas disciplinas desde temprana edad se fomenta su interés y se les brindan las herramientas necesarias para seguir carreras relacionadas. ‘Las habilidades adquiridas en esta etapa, como el pensamiento crítico, la resolución de problemas, el trabajo en equipo y la comunicación efectiva son altamente valoradas en la industria minera’, asegura.

Desde el sector público ya se están tomando cartas en el asunto. En el marco de alianzas público-privadas entre seremis y empresas de la industria minera, desde el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género comentan que ya se está trabajando con distintos establecimientos técnico-profesionales para incentivar a las alumnas que cursan especialidades relacionadas, ‘haciendo charlas y organizando visitas a universidades para que conozcan la experiencia de otras mujeres en la industria’. La próxima semana, por ejemplo, se desarrollará el congreso ‘Construyendo un futuro STEM inclusivo: Mujeres y jóvenes en la minería’, en la Región de Atacama.